Desayuno fin de semana

Para mi, lejos la comida más importante es el desayuno. Tanto así, que los días de semana me despierto media hora antes de lo normal para tomar desayuno con calma. Sin uno nutritivo no llego ni a la esquina, y tendría que estar comiendo de nuevo a media mañana.
No se asusten si encuentran que este desayuno es muy calórico, la verdad es que lo es, pero vale la pena! El fin de semana es para comer, si quieren cuidarse háganlo en la semana, y si no… los felicito! No hay nada mejor que comer!
Por otro lado, lo que comas en la mañana desaparecerá de tu organismo dentro del día si o si! Así que a ponerse las pilas con el desayuno.





Estos pastelito o dulces los compre en la mañana en la panadería “Macharoas” que queda en Eliodoro Yañez 2869, eso es justo antes de llegar a la plaza las lilas. Si viven por ahí cerca les recomiendo que vayan, el pan es increíble y el berlin que ven en la foto para que decir. Personalmente nunca me han gustado los berlines con crema pastelera, salvo por los de esta panadería, son otro nivel! Repletos de una crema pastelera de perfecta consistencia y dulzor. Otra cosa buena de esta panadería es el jamón, yo lo acabo de descubrir y creo que ya no comprare más en el supermercado, porque el que venden ahí es súper súper bueno.

Lo otro que ven en la bandeja de desayuno son unos huevos benedictinos, con esto de desayuno seguro parto el día con el pie derecho y me acuesto con el mismo. Al morderlo se siente una explosión de sabor, pero literalmente, porque la yema del huevo se rompe y se junta con todos los otros sabores, delicious!

Huevos Benedictinos





2 huevos
Jamón
1 baguette
Mantequilla
Salsa holandesa

Corta el baguette de manera vertical y pon los trozos a calentar en el horno.
Prepara los huevos al estilo “poché”. Hierve en una hoya agua, un chorrito de vinagre y sal. Cuando este hirviendo le tiras un huevo sin su cáscara, al hacerlo se va a expandir un poco. Con la ayuda de un cucharón envuelve la yema del huevo con toda la clara que se haya expandido. Lo dejas un minuto y ya esta listo. Después haces lo mismo con el otro huevo.
Retira el pan del horno y ponle mantequilla, sobre esta un trozo de jamón, luego el huevo poché y finalmente cúbrelo con salsa holandesa.


Salsa holandesa

2 yemas
1 cucharada de agua
1cucharada de limón
70g de mantequilla
Sal y pimienta

Pon en una fuente el agua, jugo de limón, sal y pimienta. Lo pones a baño María y le agregas las dos yemas, revolviendo bien entre una y otra. Después le vas agregando de a poco la mantequilla, revolviendo siempre cuidadosamente para que la salsa no se corte.
Cuando hayas agregado toda la mantequilla, retira la fuente del calor y sigue revolviendo por unos dos minutos. Finalmente vuelve la fuente al baño María y revuelve por 2 minutos más, pero esta vez sobre el calor. Se tiene que servir inmediatamente.